Tanto como comunidades de Oaxaca, así como organizaciones locales e internacionales coinciden: la única estela que producen los megaproyectos es de violencia, división comunitaria, afectaciones ambientales y a la salud
EDUCA / Servindi
En Oaxaca, la Secretaría de Economía ha entregado 322 concesiones sin consultar a los pueblos y comunidades indígenas. 41 de estas, son proyectos mineros que ven en los Valles Centrales una oportunidad de generar ganancias millonarias a costa de la vida.
Actualmente, en esta región operan dos minas: ‘Minera Cuzcatlán’ en San José del Progreso y ‘El Águila’ en San Pedro Totolapan, en ambos casos las empresas extranjeras extraen oro y plata, metales que son procesados en el norte del país.
Rosalinda Dionisio Sánchez, es originaria de San José del Progreso y a lo largo de los 10 años que la minera lleva operando en su hogar solo ha visto desigualdad: “No hay desarrollo en el pueblo… con sueldos raquíticos tienen solo a un pequeño grupo de la comunidad trabajando en la empresa, los mejores pagados vienen desde el norte del país, la riqueza se lo llevan ello a otros estados y otros países”.
Asimismo señala que desde que inició la lucha para tratar de frenar la contaminación generada por la mina “solo hemos sufrido amenazas y atentados”.
El 15 de marzo de 2012, Rosalinda sobrevivió a un atentado junto con un compañero de la Coordinadora de Pueblos Unidos del Valle de Ocotlán, mientras que Bernardo Vásquez Sánchez falleció.
El atentado se perpetró en la carretera federal que conduce a su comunidad. Para ilustrar un poco sobre los impactos negativos del proyecto “San José”, presentamos el tercer video de la campaña “Ni Oro Ni Plata, la Minería Mata” del Colectivo Oaxaqueño en Defensa de los Territorios.
Según información proporcionada por la propia empresa Cuzcatlán-Fortuna Silver Mines, el proyecto minero ubicado a 40 km de la ciudad de Oaxaca generará impactos permanentes al medio ambiente, como la alteración de la geoforma, en la profundidad del suelo, erosión y pérdida del suelo natural.
Las detonaciones provocan ruido y vibraciones que se perciben hasta 8 kilómetros de distancia, las principales comunidades afectadas son San José del Progreso, Magdalena Ocotlán, San Matías Chilazo, La Noria de Ortiz, Monte del Toro y San Martín de los Cansecos.
El presente vídeo advierte los impactos del proyecto “San José”, es parte de la campaña “Ni Oro Ni Plata, la Minería Mata” impulsada en la región por autoridades agrarias y municipales, además del Colectivo Oaxaqueño en Defensa de los Territorios.
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Imagen: Educa