Aunque los tiempos en que las mujeres por ley no podían votar o estudiar han sido superados, en América Latina y el Caribe todavía existen leyes que discriminan a las mujeres en distintos ámbitos. El Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), junto con ONU Mujeres, está realizando un mapeo de leyes discriminatorias en la región con miras a facilitar su derogación
ONU Mujeres / Servindi
En América Latina y el Caribe hay mujeres que, por ley, en pleno 2017, no pueden heredar tierras, no pueden acceder a ciertos trabajos, como la minería, o no pueden darle su nacionalidad a los hijos e hijas que tengan.
“Todavía existe legislación que discrimina a las mujeres, impidiéndoles el ejercicio de ciertos derechos. Esa era la norma hasta bien entrado el siglo XX, en particular para los derechos civiles y políticos. El derecho a votar, a ser elegidas para cargos públicos, a la educación, al empleo y otros derechos ciudadanos eran negados a las mujeres. La legislación representaba el orden social en el cual los hombres dominaban el mundo público, y las mujeres permanecían relegadas al mundo privado, y aún dentro del mundo privado, no tenían igualdad de condiciones con los varones”, explica Natalia Gherardi, Directora Ejecutiva del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género.
“La mayor parte de las barreras formales de acceso a derechos, es decir, la legislación que excluye a las mujeres de ciertos derechos, se ha superado; sin embargo, algunas todavía persisten tanto en la legislación política como en la normativa que regula la vida familiar, la vida social y la vida laboral”.
Gherardi, desde el Equipo Latinoamericano de Justicia y Género, en colaboración con ONU Mujeres, realiza un estudio para identificar a nivel regional cuáles son esas leyes que discriminan a las mujeres. “Lo primero que tenemos que hacer en la ruta hacia legislaciones libres de discriminación es identificar cuáles son esas leyes que explícitamente, e indirectamente también, están discriminando a las mujeres, para reformarlas y mejorarlas desde la agenda de los Congresos”, explicó Luiza Carvalho, Directora Regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe.
“Las leyes, como base normativa de nuestras sociedades, también construyen la manera en la que vemos al mundo, y si algunas de estas leyes son discriminatorias, tenemos que atacar el problema de raíz, hasta lograr que el ejercicio pleno de los derechos de las mujeres y sociedades igualitarias desde su normativa”.
El Equipo Latinoamericano de Justicia de Género, además de colaborar con ONU Mujeres para identificar y erradicar la legislación discriminatoria, trabaja para alcanzar la igualdad de género de manera sustantiva en la región, y puede conocer más de su trabajo aquí.
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Foto: En algunos países, la legislación establece que las mujeres no pueden acceder a la herencia y tenencia de las tierras. Esto se considera una legislación discriminatoria. Foto: ONU Mujeres